Marcas de la guerra civil española
Edad contemporánea
Siglo XX
Ubicación:
Sala capitular
Durante la guerra civil el monasterio fue utilizado como cuartel militar y parque de explosivos del ejército nacional, concretamente de la primera bandera de falange de Palencia. Restos de esa ocupación se mantienen en la sala capitular del monasterio, donde en uno de los fustes quedaron grabados un yugo y unas flechas, aunque por los muros de todo el monasterio podemos observar grafitos similares. Debemos señalar que no todas las marcas encontradas se corresponden con este periodo bélico, también encontramos inscripciones realizadas por “visitantes” del monasterio cuando se encontraba abandonado, dejando su firma para la posteridad. Suele ser recurrente la pregunta sobre por qué no se borraron esas marcas durante la restauración de los años 80. La razón se debe al criterio “arqueológico de dicha actuación. Estas marcas forman parte de la historia del edificio y como tal, debemos respetarlas. Podemos denominarlas como las cicatrices del monasterio. Eso sí, si alguien dejase su “firma” en la actualidad, ha de saber que ésta sería borrada y él multado.
Los grafitos no son los únicos testimonios que tienen su origen durante la guerra civil española. Si nos fijamos en los muros del monasterio observamos numerosos impactos de bala, siendo muy visibles en las ventanas situadas en el patio de entrada al edificio. Estos balazos no son consecuencia de ninguna batalla, sino que se deben a momentos de asueto y entrenamiento de los soldados.